Un Ribba para mamá

Días después del Día de la Madre, mi madre me dijo, con cierta tristeza, que esperaba que le hubiera hecho algo de scrap para su día. Me quedé estupefacta, no me lo esperaba. Ella veía que el mundo craft me tenía absorta y esperaba que le hiciera algo, y tenía razón.

Es cierto que desde hace meses quería hacerle algo relacionado con la costura. De pequeña me hacía muchísima ropa y siempre está con arreglos aquí y allá. Además, desde que me quedé embarazada la embarqué en mil proyectos de los que siempre ha salido sin ningún problema pero no poco esfuerzo: que si la estructura de tela de la minicuna, que si el estor de la habitación de Aitor, que si los protectores de las cunas, que si los edredones, que si unas sábanas, que si unos baberos, que si una ropita por aquí, que si una ropita por allá, que si un par de cambiadores, que si unas bolsitas para meter los pañales... la lista de trabajos realizados es interminable... y para colmo, la pido que me cosa más de 400 banderines para el cumpleaños de Aitor...

En fin, que tenía una enorme deuda con ella. Así que aquel inocente comentario me llegó al alma y me dije, no puede pasar ni un día más sin que le haga por fin un proyecto de costura. Hace meses compré un marco Ribba donde tenía pensado introducir elementos de costura junto a una foto, y éste ha sido el resultado:

Os cuento los elementos que lleva:

1º. El primer número de la revista El Costurero regalaba una costurera para recortar y convertirla en colgador de pendientes. El dibujo, de Laliblue, es maravilloso, así que me vino de perlas para mi Ribba... de perlas, las que pegué sobre las cabezas de los alfileres que según la idea inicial eran el lugar donde pinchar los pendientes... Recorté la figura y la manché de tinta roja, para realzar, y para conseguir que destacara aún más, elevé la imagen.

2º. Los banderines. No podían faltar. Son un elemento alegre y que me servía para evocar el último trabajo que le pedí a mi madre. Para hacerlos utilicé los restos de tela que sobraron de los banderines originales del cumpleaños de Aitor, que hicimos con telas estampadas de IKEA, de la linea FEDRIKA y SUSANA, entre otros.

3º. La máquina de coser. Es un sacapuntas de mi infancia. Seguro que más de una y de uno recuerda la colección de sacapuntas con distintas formas clásicas que se vendían en los años ochenta. También tengo una máquina de escribir, una cámara antigua de fotos, una estufa, un gramola... Estuve buscando máquinas de coser en miniatura, pero qué mejor que rescatar una del recuerdo.

4º. El bordado. Sólo he trabajado el punto de cruz. Sin embargo, recientemente estoy viendo una oleada interesante de proyectos con otras técnicas de bordado que quiero probar. Me encantaría aprender el bordado con aguja mágica (me quedo con las ganas de participar en un curso en Duduá :(   ), y me fascina alguno de los trabajos de Kraft Croch... Además, recientemente me compré un libro con cientos de puntos distintos de bordado que espero explorar. En fin, que esta pequeña tarjeta es un primer intento para afrontar nuevos retos...

Espero que os haya gustado. Yo he quedado muy contenta, y la agasajada también!!!